Aunque desde hace algunos años los espacios flexibles, funcionales y aquellos pensados para compartir, como lo son la cocina, el living o la terraza, son una tendencia en las viviendas —especialmente en las de alto estándar—, la pandemia ha exigido a las inmobiliarias proyectar de manera diferente el diseño de los productos para satisfacer la nueva forma de habitar los hogares. Ejemplo de ello es que el teletrabajo o el estudio a distancia requieren incorporar nuevos recintos o espacios. Vicente Domínguez, director ejecutivo de la Asociación de Desarrolladores Inmobiliarios A.G., señala que efectivamente se han estado haciendo algunos cambios en los proyectos y que, como consecuencia de la pandemia, el trabajo a distancia se ha fortalecido. “Ello requiere que la vivienda tenga incluida la posibilidad de efectuar tareas en su interior, lo que tiene que ver con la disposición de espacios adecuados, así como con el acceso a tecnología de conexión remota”. Varias inmobiliarias están haciendo modificaciones en sus proyectos de acuerdo a las nuevas necesidades actuales de sus clientes. Exxacon ha ido reforzando y profundizando en diseñar espacios que sean más versátiles, que se adapten mejor a las distintas necesidades de sus habitantes a lo largo del día, y objetivos específicos de cada uno. Y es así como la necesidad constante de luz se ha transformado en un aspecto clave en todos sus proyectos, lo que se ha reflejado en aquellos recientemente lanzados, como Cuvée (Parque Cousiño Macul), y en Lift (Vitacura). Gabriela Diéguez, gerente de Marketing y Asuntos Corporativos de Inmobiliaria Exxacon, indica que los principales cambios tienen relación con lograr que en el hogar se pueda vivir, pero también trabajar cómodamente. “Por ello, hemos hecho hincapié en el diseño de espacios de escritorio o home office en el dormitorio, que pueda cumplir ese rol, o bien dar espacio en habitaciones secundarias para este fin. Por otro lado, en proyectos que dan espacio a mayor innovación, como Isidora & Benjamín —próximo proyecto a lanzar—, comprendimos lo relevante que es contar con flexibilidad de espacios”. Almagro, en los proyectos Carrera II (Santiago), San Eugenio (Ñuñoa) y Alderete Cook (Las Condes) —que por sus características del lugar en el que están—, ha incorporado amplias áreas verdes y jardines que consideran un gran porcentaje de los terrenos en donde se emplazan los edificios, lo que permite desarrollar diferentes actividades para los residentes. “Dado esto, estamos diseñando en aquellos proyectos que lo permiten, áreas verdes que conforman un patio interior caminable, con paisajismo y arquitectura diferencia-dores, donde puedes salir de tu departamento y disfrutar en un ambiente de seguridad de este espacio con tus hijos, con la familia o con tus mascotas; se vuelve un atributo relevante y diferenciados para las personas que buscan vivienda”, dice Gabriela Hernández, gerente inmobiliario de Almagro. Indesa ha potenciado las características más valoradas por las personas durante la pandemia, por ejemplo, las terrazas y salas de estar o living, tanto en departamentos como en casas, para que tomen mayor protagonismo. Prueba de ello son los proyectos de departamentos Riesco Leguía (Las Condes) y Karün (Vitacura) —que está en construcción— y de casas Alto Polkura (Chicureo), donde las terrazas están separadas de la vivienda. Juan Pablo Bezanilla, gerente general de Inmobiliaria Indesa, destaca que desde hace años que han venido incorporando salas de estar, honre office y terrazas doble altura, y para los proyectos nuevos han potenciado más aún estos recintos. “Una tendencia que vimos venir hace años, fue que algunos clientes querían tener un lugar donde trabajar cerca de su casa, pero no dentro de ella. Así, en el proyecto Riesco Leguía creamos estudios privados en el zócalo del edificio”. Nuevas necesidades La pandemia y actual contexto sanitario, donde el encierro es uno de los principales factores, ha cambiado la forma en que las personas se relacionan con el lugar en el que viven, surgiendo nuevas necesidades y la valoración de atributos que hoy son claves para mejorar la calidad de vida de quienes residen en un proyecto. “Creemos que las nuevas necesidades de las personas que están vinculadas a amplitud, flexibilidad, conexión con el exterior y multifuncionalidad llegaron para quedarse y serán claves en su decisión de compra futura”, sostiene Gabriela Hernández. Juan Pablo Bezanilla agrega que uno de los efectos de la actual situación es que las personas están haciendo más vida en sus casas con su familia, amigos o incluso solas, lo que ha potenciado la necesidad de flexibilizar los espacios de las casas y departamentos. “A ello se suma la mayor importancia a aspectos como la decoración, distribución interior y luz natural, entre otros. De ahora en adelante, las personas buscarán hogares donde se proyecten y estén cómodos, y puedan llevar de mejor forma la vida al interior de ellos”. A juicio de Gabriela Diéguez, lo anterior termina siendo un cambio profundo en la forma de ver y desarrollar proyectos, pero —precisa— hay que tener presente que la industria inmobiliaria trabaja a futuro y que un diseño de hoy puede que se concrete en dos años más, y luego tarde en construirse un par de años más. “Por lo tanto, es importante tener precaución a la hora de tomar muchas decisiones que quizás el día de mañana no sean relevantes; debemos ser responsables y al mismo tiempo estudiar muy bien lo que las personas necesitan”. Fuente: El Mercurio – Clasificados Propiedades